Noche Mágica.

Ayer después de trabajar hasta las 20.00 en el taller, me entraron unas ganas tremendas de salir corriendo de casa, no se si fué la necesidad de desconectar o el pensar que era la noche de San Juan: una de las más especiales del año (...o eso he pensado siempre) lo que me impulsó a salir. Y como todo en esta vida no va a ser "labora et labora", agarré la nevera con cuatro cosas para cenar y cargada de cervecitas frequitas y mojito que hice en un pis-pas, alé-alé... a la playa que me largué!!.... fuí hasta mi playa favorita del mundo mundial: Los Alcázares, una playa llena recuerdos de mi infancia y de mi juventud.

Allí estuvimos comiendo sardinas, por cortesía del Ayuntamiento de los Alcázares que había montado en la playa de la Pescadería un escenario, en el que hubo un DJ pinchando música hasta altas horas de la madrugada, fiesta de la espuma, hoguera, fuegos artificiales, atracciones para los más pequeños y unas cuantas cosas más.