Infantil

Hace como un mes más o menos creo yo! (esto del tiempo lo llevo fatal!), os enseñaba esta mesilla de noche que entraba al taller. La pobrecita venía muy enferma, tenía esa enfermedad "cruel y despiadada" que afecta a muchos muebles de madera y más de cierta edad. Tras pasar por varias operaciones para hacer desaparecer su mal y permanecer aislada, bañada en curativo y envuelta entre cirigía y cirugía, llego el momento del ansiado... lifting!!!.

Erase una vez, una lámpara de latón que vivía triste y arrinconada en una almoneda. Sus años de juventud y esplendor (...por allá por los 70) habían pasado muy rápido y sin querer las modas y el tiempo la habían desterrado hasta el lugar donde ahora estaba. Allí los días eran grises y sin sabor. Un día entró a la tienda una "extraña mujer" (mmm....yo?) y al llegar al fondo del local la vió, medio oculta, entre una montaña de ropa vieja y unos muebles rotos de formica. Al mirarla sucedió algo mágicooooo!!!!

Esta lámpara os la mostraba hace unas cuantas semanas junto con otras cosas que entraron al taller de Le Jardin. He tardado mucho en volver a darle vida, porque no encontraba recambios para ella debido a los años que tiene, así que finalmente tuve que apañarme con los originales que pude salvar y unos cuantos detalles de fontanería, sí como estáis leyendo fontanería, que me han hecho su papel y que aunque aparentemente no se vean, están. Bueno os pongo las fotos de como luce ahora y después os cuento su historia.